martes, septiembre 26, 2006

PHOENICIS

Alfredito ya no camina en sus piernas, solo mira a través mio deseando tocar el reflejo de la mirada, me mira, asienta la cabeza dorada por los sueños y me alcanza esas manos que nunca pudo mover , su barba infantil crece solo con sus juegos y me mira, ríe y me besa, he de entender que somos hermanos ?, especies de un solo padre y de la madre llamada Decepción.

De aqui en medidos años visitaré tu pecho para calmar tus dolores y encender los fuegos de guerra llamando a los hombres de tu ejercito mental ... caminaremos en batalla a esta paz.